• La producción de maíz en México cerrará 2024 con apenas 23.3 millones de toneladas, el nivel más bajo en más de una década, poniendo en riesgo la autosuficiencia histórica del país, especialmente en maíz blanco.

La producción de maíz en México cerrará en 2024 con sus cifras más bajas en más de una década, con apenas 23.3 millones de toneladas, según estimaciones del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).

Este descenso marca un retroceso significativo en la autosuficiencia del país, especialmente de maíz blanco, que se proyecta en 20.3 mt., su menor nivel en 12 años.

Desde 1994, México ha sido autosuficiente en este cultivo, sin embargo, factores como el auge de otros bienes más rentables para la exportación, como las berries, y condiciones climáticas adversas, incluyendo sequías en Sinaloa, Sonora y Tamaulipas, han estancado su producción.

Creciente dependencia de las importaciones

La menor producción nacional contrasta con el aumento histórico de las importaciones. En 2023, México compró 19.6 millones de toneladas de maíz al extranjero, y para 2024 se espera un alza del 21%, con 23.9 millones de toneladas.

La mayoría de estas adquisiciones provienen de Estados Unidos, lo que convierte a nuestro país como el mayor comprador mundial de este grano, esta situación ha generado preocupación por la sostenibilidad del sector maicero.

Impactos en la economía y en el consumo básico

Juan Carlos Anaya, director del GCMA, advirtió que la disminución en la producción de maíz blanco pone en riesgo la autosuficiencia histórica de México en este grano, con posibles aumentos en los precios del maíz y de la tortilla, un básico en la dieta de la población.

Pese a los esfuerzos del gobierno para reducir la dependencia del maíz amarillo, los resultados han sido limitados. En 2023, el entonces secretario de Agricultura, Víctor Villalobos, admitió que no sería posible sustituir completamente las importaciones, aunque se planteaba reducirlas entre un 30 y 40%. Sin embargo, la producción nacional ha continuado su descenso, y las compras al extranjero crecieron un 37% desde 2022.

Este escenario plantea la necesidad de medidas urgentes para fortalecer la producción interna y garantizar la estabilidad de precios en uno de los productos más importantes para los mexicanos.

Fuente: www.porcicultura.com