El Consejo Mexicano de la Carne presentó su Compendio Estadístico 2025, en el que destaca que el fortalecimiento del ingreso familiar ha impulsado el consumo de carne en México. También abordaron los retos sanitarios y el panorama del comercio internacional.
El consumo de carne en México aumentó un 4.4% en 2024, impulsado por el fortalecimiento del ingreso de las familias mexicanas, de acuerdo con el análisis del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne).
Así lo consideró Comecarne al presentar su Compendio Estadístico 2025, el cual recoge los indicadores más destacados en cuanto a consumo, producción y comercio cárnico nacional e internacional de 2024.
Ingreso fuerte, consumo creciente
El documento señaló que en 2024, la demanda nacional llegó a 10.77 millones de toneladas, con lo que sumó tres años al alza. En ese mismo sentido, el consumo per cápita alcanzó los 82 kilogramos, 2.8 más que en 2023
El Comecarne atribuyó este crecimiento a diversos factores económicos, entre ellos el incremento en las transferencias gubernamentales por los programas sociales, el aumento del salario mínimo y la baja tasa de desempleo que ha mantenido el país.
La mejora del poder adquisitivo ha permitido que los consumidores mexicanos amplíen su dieta con más proteína animal, pasando de proteínas más económicas a carnes de mayor valor como el cerdo y la res.
México: sexto lugar en consumo de carne
Los datos de crecimiento nacional destacan frente a los globales: en todo el mundo el consumo de carne bajó 0.2%. México, en tanto, se posicionó así en el sexto lugar en cuanto a la demanda de cárnicos.
En términos generales, la producción de carne del país subió un 2.3% en 2024, pese a la sequía que ha afectado a gran parte del norte de México. En tanto, las exportaciones cayeron un 8.8%, al tiempo que las importaciones crecieron un 8%, todo esto respecto a 2023.
Por especie, el consumo de carne de cerdo creció 6.7% en México , alcanzando 3.2 millones de toneladas. La carne de res también mostró un aumento relevante, del 5.7%, con un volumen total de 2.2 millones de toneladas. En cuanto al pollo, su consumo fue el más alto en términos absolutos, con 4.9 millones de toneladas, y un crecimiento anual del 2.3%.
Estas cifras confirman una tendencia en la que los mexicanos siguen incorporando más proteína animal en su dieta, con un avance particularmente notable en carne de cerdo.
Seguridad alimentaria garantizada, pese a retos sanitarios
La directora general de Comecarne, Macarena Hernández, señaló que aunque se han presentado retos sanitarios, como el brote de Influenza Aviar en Brasil y la reaparición del gusano barrenador en México, el consumidor no debe preocuparse ya que los protocolos sanitarios garantizan la seguridad de los alimentos.
“Estamos convencidos de que el Senasica está trabajando permanentemente en garantizar que todos los productos que entren a México cumplan con todas las condiciones sanitarias y de inocuidad también”, enfatizó Hernández.
Fuente: www.ganaderia.com