México y EU colaboran para establecer criterios y protocolos de común acuerdo, sobre el comercio de bovinos y el manejo de la plaga del gusano barrenador

Derivado del trabajo conjunto entre México y Estados Unidos para enfrentar la plaga del gusano barrenador del ganado, es posible que los criadores mexicanos puedan reanudar sus exportaciones de cabezas de ganado vivo al mercado estadounidense para noviembre o incluso antes.

“El gobierno de Estados Unidos, la secretaria de Agricultura —Brooke Rollins—, planteó la fecha de noviembre como probable fecha de apertura. Estuvo recientemente el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural —Julio Berdegué Sacristán— en Estados Unidos, con Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte, de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y se planteó la posibilidad de que fuera antes”, comentó la mandataria.

En su conferencia de prensa de todas las mañanas, Claudia Sheinbaum refirió que lo importante del diálogo entablado entre los dos países, sobre el comercio del ganado bovino en pie y la contaminación de la plaga del gusano barrenador, consiste en establecer criterios y protocolos de común acuerdo, para no dejar margen a la libre interpretación. Hace unos días se dio a conocer un plan de control de la plaga, acordado por México y Estados Unidos.

“Se ha trabajado mucho en los criterios técnicos entre ambas secretarías (de Agricultura). Entonces, pues hay mucho avance”, dijo la mandataria.

Por lo pronto, Claudia Shienbaum refirió que sigue adelante el plan de repuesta para frenar la plaga del gusano barrenador, que consiste, entre otras acciones, en la rehabilitación de una planta productora de moscas estériles en Chiapas

Asimismo, la mandataria refirió que su gobierno ha entablado acuerdos con los ganaderos de los estados más afectados por el cierre de la frontera, como Sonora y Chihuahua, para aplicar un plan de solución provisional en lo que se reactivan las exportaciones de bovinos en pie.

Aunque Sheinbaum Pardo no explicó en qué consisten esas medidas provisionales, la empresa de consultoría Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) explicó que la propuesta del gobierno consiste en que los engordadores sacrifiquen las cabezas en México y que exporten la carne fresca a Estados Unidos, lo cual sí está permitido, y que también la vendan dentro del mercado nacional.

Si bien esta es una propuesta que permitirá a los engoradadores darle una utilidad a su mercancía, no necesariamente obtendrán los mismos ingresos que con el ganado en pie, ya que México carece de un sistema de clasificación de la carne, como la que existe en Estados Unidos, para distinguir entre distintas clases y calidades de carne.

Fuente: fortunaypoder.com